jueves, 19 de julio de 2012

La luna y el lobo.

Puedo sentir sus pasos andar, su mirada chocando con la mía.
Luego mi mente me trastorna con promesas que nunca me importaron.
Luego me siento como idiota por no poder razonarlo, Me siento como idiota por imaginarlo.

Después viene el acto esperado de una noche en vela.
Puedo sentir el abandono, pero no me importa.
Puedo sentir su repulsión pero no me importa.
Puedo sentir el orgullo decaer, pero al final la locura domina.

¿Pues cual arma es más útil para levantar el valor que esa misma locura?

Me acerco y mi mente decae, mis ideas flaquean.
Dejo que el salvajismo domine, pues su fuerza alimenta la siguiente caza.
Todo dialogo escrito con tanta fuerza en la mente simplemente se derrumba.
Mis dudas se mueren y mi estupidez me obliga a sonreír.

Puedo escuchar mis certezas morir tras un “babum, babum, babum”, que podría despedazarme mi pecho.

Sé que soy el lobo, pues soy el líder, soy el depredador, soy la bestia, soy el espíritu solitario.

fases-de-la-luna

Sé que ella es la luna, pues el guía, es la luz en las noches heladas, es la musa, la que todo lo ve.

Sin embargo ¿Quién es aquel? Volando en lo alto. Con plumaje blanco y arrogante, escarbando en la noche, robándome en la tenebrosidad la comida de la que di caza por la tarde.

Cree tener el derecho, y cree que yo no lo tengo.

Creaturas tan desdeñadas pueden caer fácilmente de ser alcanzadas.
No importa que tan alto pueda elevarse, que tan cercas crea estar de ella.

Soy el lobo y ella es la luna.
Sentado a la espera que alguna noche le regrese el llamado.
Sentado esperando que alguna noche lo acceda.

Los buitres siempre podrán volar más cerca de la luna que los lobos.
¿Pero de los dos quien es el la añora más?

Soy el lobo y ella es la luna.
Que tras la larga noche, mi pelaje se oscurece.
Mientras que el plumaje del buitre se aclara.
Que por el día, me obliga a despedazar a quien se logre cruzar.

Anqué el abandono me lleve a la locura seguiré aullando, pues solo existe una luna.

J.Misael